¿Qué se necesita para ser feliz? ¡Oh, vaya pregunta!

Pues si estás en la misma búsqueda que el resto de los seres humanos y te gusta explorar la vida en busca de la felicidad, abrocha tu cinturón, porque en esta publicación te vamos a preparar de forma básica para el viaje más emocionante que jamás vas a emprender.

Sí, un viaje que dibujará tu sonrisa de forma permanente en tu rostro. 🙂

Hoy, vas a sumergirte en el maravilloso y enigmático mundo de la felicidad, ese estado anhelado que todos perseguimos como si fuera el último pedazo de dulce chocolate en una reunión familiar.

En esta publicación, te daré recomendaciones generales de coaching de vida sobre qué se necesita para ser feliz, así como cinco consejos que puedes seguir.

Todo lo que te compartiré, lo haré desde mi experiencia como coach de vida y ejecutivo.

Un ejemplo de qué es ser feliz

Una dama está en una playa con sus brazos abierto mirando al cielo y sonriedo.

Imagina que estás bajo un frondoso árbol y disfrutas de su sombra durante un caluroso día de verano.

Estás con la compañía de amigos y familiares. Los niños corretean y ríen alegremente mientras corren de un lado a otro. El aroma de una deliciosa barbacoa se mezcla con una refrescante bebida.

La risa es contagiosa y cada momento parece digno de una foto de revista. En este instante, todos se sienten conectados y felices, como si el tiempo se detuviera y solo existiera la satisfacción y plenitud.

¡Y ahí lo tienes! Ese es el tipo de momento que cualquiera busca para ser feliz.

Ahora, ¿qué se necesita para llegar allí? ¿Un manual de instrucciones complicado? ¿Un mapa? ¿Haber nacido en un mes en particular para disfrutar de más dosis diarias de alegría?

Bueno, a partir de este sencillo ejemplo, te invito a que juntos exploremos qué es lo que realmente se necesita para ser feliz.

No te preocupes, no se trata de fórmulas matemáticas ni de ecuaciones complicadas.

Solo se trata de reflexionar brevemente sobre este tema y descubrirás un cambio en tu perspectiva que rápidamente te acercará a la felicidad.

¿Qué valores necesito para ser feliz?

Diferentes etiquetas coloridas forman la palabra valores.

La respuesta a la pregunta sobre qué es lo que se necesita para ser feliz es sencilla, pero puede ser difícil de asimilar y aplicar.

Para ser feliz solo necesitas aceptar y aprovechar lo que la vida te da en cualquier momento.

Para ser feliz no se requiere de más, al contrario, se trata más de aceptar y menos de desear.

Cómo ser feliz se trata de aprender a soltar, confiar y disfrutar. No se trata de aferrarse, empoderarse y esforzarse por tener más.

Asimismo, la autenticidad también es esencial para la felicidad.

Ser fiel a uno mismo y vivir en congruencia con nuestros valores y pasiones crea un sentido de autenticidad y plenitud en nuestras vidas.

Aprender a manejar las adversidades y los desafíos con resiliencia y una mentalidad positiva también juega un papel crucial en la búsqueda de la felicidad.

A través del desarrollo de la habilidad de aceptar que el cambio y la incertidumbre son parte de la vida, podemos crecer y florecer en momentos difíciles.

Por último, practicar la generosidad y el servicio a los demás nos brinda una sensación de conexión y propósito más profundo, reforzando nuestra felicidad a través del impacto positivo que podemos tener en la vida de los demás y en la sociedad en general.

Al abrazar estos valores y trabajar constantemente en nuestro crecimiento personal, podemos nutrir y cultivar la felicidad en nuestras vidas de manera significativa y sostenible.

Por lo tanto, algunos valores que necesitas para ser feliz son los siguientes:

  • Aceptación
  • Autenticidad
  • Congruencia
  • Resiliencia
  • Mentalidad positiva
  • Generosidad
  • Servir a los demás.

“No persigas, no busques, no preguntes, no golpees, no exijas, relájate. Si te relajas, viene. Y si te relajas, estará ahí. Por último, si te relajas, empezarás a vibrar con ello”. Osho

Qué se necesita para ser feliz: relajarse

Una dama está sentada relajada en el césped en una postura de meditación.

Cuando escribo que para ser feliz uno necesita relajarse, tengo que confesar que me siento incómodo.

Lo mismo me sucede frases como: “no buscar”, “no perseguir”, “no exigir”, etc.

¿Por qué me siento incómodo? Porque hemos sido programados para lo contrario.

Se nos ha dicho que tenemos que trabajar duro por lo que queremos. Te dicen: “no pain, no gain”. Es decir, sin dolor, no hay ganancia.

De hecho, gran parte de los clientes que llegan al coaching vienen con esta intención. Vienen dispuestos a luchar por hacer realidad sus sueños.

Es ahí donde surge la incomodidad. ¿Cómo así de que si queremos ser felices, ¿no necesitamos hacer ningún esfuerzo?

Esta afirmación, literalmente me resultó ajena a mi modo habitual de pensar y trabajar, pero también me puso a reflexionar.

Me tomó unos segundos para saborear estos mensajes en mi mente. No obstante, poco a poco logré comprender mejor la sabiduría que hay detrás de estas afirmaciones.

Mientras reflexionaba, me vinieron a la mente algunos de los momentos que más felicidad han aportado a mi vida.

Rápidamente, me pude percatar, que esos momentos, y los regalos que llegaron a través de estos, no requirieron esfuerzo de mi parte. Simplemente, tuvieron lugar, se dieron, se manifestaron.

Fue aquí donde me dije: «Es verdad, para ser feliz, uno no se tiene que esforzar».

Reflexión

Trae a tu mente algunos de los momentos más felices de tu vida.

¿Qué características tienen esos momentos en común?

¿Qué tanto esfuerzo requirieron de parte tuya?

¿Cómo se manifestaron esos momentos?

En vista de la importancia que tiene la relajación para llegar a la aceptación del presente que la vida te da, permíteme compartir contigo tres recomendaciones.

3 consejos para relajarse

Una bombilla está encendida junto a la palabra consejos.

1.     Respiración consciente:

Dedica unos minutos a respirar profundamente, inhala y exhala lentamente, enfocándote en cada respiración. Esto ayuda a reducir el estrés y a centrar la mente.

2.     Práctica de mindfulness:

Realiza actividades con plena conciencia, como meditar, hacer lectura o pasear en la naturaleza o simplemente observar tus pensamientos sin juzgarlos. Conectar con el presente disminuye la ansiedad y te da paz.

3.     Tiempo para hobbies:

Dedica tiempo regularmente a actividades que te apasionen, como leer, dibujar, practicar deportes o hacer ejercicios. Estas actividades lúdicas y gratificantes fomentan la relajación y el equilibrio emocional.

Cuestiona lo que crees que necesitas para ser feliz

Una ejecutiva rasca su cabeza con un dedo en señal de cuestionamiento.

Hemos ido construyendo nuestras vidas sobre la creencia de que necesitamos ciertas cosas para ser felices. Por ejemplo: dinero, poder, éxito, aceptación, fama, amor, amistades, y mucho más.

Es fundamental cuestionarnos acerca de lo que realmente significa la felicidad para cada uno de nosotros, ya que este concepto es profundamente subjetivo y varía de persona a persona.

Al reflexionar sobre ello, podemos descubrir los elementos que verdaderamente nos aportan bienestar y alegría en la vida.

Reflexión

¿Cuáles son los elementos que crees debes tener para ser feliz?

¿Cuál es la combinación exacta de estos elementos que pones en tu receta de felicidad?

Es decir, 8/10 en dinero, 4/10 en poder, 7/10 en éxito, 10/10 en el amor, etc.

La prisión de tus deseos

Una vez que nos tragamos las creencias anteriores, desarrollamos instintivamente un apego especial por ese algo o alguien.

¿Por qué? Simplemente, porque nos convencemos de que mientras no obtengamos lo que deseamos, no seremos felices.

Entonces comenzamos a luchar con todas nuestras fuerzas.

Lastimosamente, olvidamos que la consigna es: trabaja para vivir, no vivas para trabajar.

La búsqueda de la felicidad

Un grupo de bolas con caras tristes rodean a una bola amarilla con cara de felicidad.

Cuando de la búsqueda de la felicidad se trata, es común iniciar los esfuerzos por adquirir aquello que alimenta nuestros deseos de felicidad.

El tema con esta búsqueda, es que generamos una servil dependencia emocional hacia esa cosa o alguien.

Lo preocupante, es que esa dependencia puede crecer hasta el punto de concederle el poder de regir nuestros actos. Es así como terminamos siendo controlados.

Con esto no quiero decir que realizar lo que nos proponemos no aporte a la felicidad. Claro que nos vamos a estremecer de una alegría al conseguirlas. Pero esta alegría es pasajera. Lastimosamente, el beneficio emocional se diluye rápidamente con el pasar de los días.

La búsqueda de la felicidad es una aspiración universal y atemporal que ha estado presente a lo largo de la historia de la humanidad. Sin embargo, en los tiempos modernos, hay varias razones por las cuales tantas personas continúan buscando la felicidad de manera activa y aparentemente más visible en la sociedad actual.

Algunas de estas razones incluyen:

  1. Individualismo y empoderamiento personal:

    Las sociedades modernas tienden a valorar más la autonomía y el empoderamiento individual. Como resultado, las personas sienten una mayor responsabilidad sobre su propia felicidad y están dispuestas a tomar medidas para alcanzarla.

  2. Influencia de los medios de comunicación y redes sociales:

    Los medios de comunicación y las redes sociales pueden influir en las percepciones de la felicidad al mostrar imágenes y narrativas idealizadas de la vida de otras personas. Esto puede llevar a una comparación constante y una búsqueda incesante de una vida más feliz o satisfactoria.

  3. Desarrollo personal y espiritual:

    Muchas personas buscan la felicidad como parte de su camino de desarrollo personal y espiritual. Quieren crecer como individuos, encontrar un propósito en la vida y experimentar una sensación más profunda de bienestar.

    La búsqueda de la felicidad es una parte natural de la experiencia humana y puede llevar a un crecimiento personal significativo.

La pérdida de la felicidad

Una carita feliz en tono cyan se encuentra rodeada de caritas felices amarillas.

Una vez que logras algo que aporta a tu felicidad, surge otro asunto.

El tema a continuación es que ahora tenemos otro asunto que manejar. ¿Cuál es?

El temor a perder lo que creemos es la fuente de felicidad.

La angustia puede comenzar a reinar ante la posibilidad de vernos privados de aquello que tanto nos costó. Y qué decir si lo llegamos a perder.

La satisfacción del logro se puede ver destronada ante la tristeza de la pérdida. Es por eso que anteriormente publiqué sobre el secreto de la felicidad: no te aferres a nada.

Esta agotadora tarea, evitar la pérdida de la felicidad, es un vicio que apenas nos deja energía para dedicarnos a vivir y disfrutar plenamente de la vida que ocurre hoy.

En la búsqueda de qué se necesita para ser feliz, muchas veces terminamos siendo presos de nuestros deseos y autoprivados de nuestra libertad para ser felices por temor a perder.

Reflexión

  • ¿Cuáles son las ataduras que te tienen preso hoy en la búsqueda de la felicidad?
  • ¿Es un trabajo extenuante?
  • ¿Acaso es el ejercicio físico constante?
  • ¿O llevas una dieta extrema?
  • ¿La conquista de una persona?
  • ¿Alguna actividad especial que te ocupa?
  • ¿Será una creencia mental?

5 consejos para ser feliz

Una bombilla está encendida junto a la palabra consejos.

Para alcanzar la felicidad, es fundamental cultivar un equilibrio entre diversos aspectos de la vida.

  1. En primer lugar, es crucial desarrollar una actitud positiva y practicar la gratitud diariamente, reconociendo y apreciando las pequeñas cosas que nos brindan alegría.
  2. Es esencial establecer objetivos realistas y significativos, ya que trabajar hacia metas personales nos brinda un sentido de propósito y logro.
  3. La construcción de relaciones sólidas y saludables también juega un papel clave, porque la conexión con otros nos proporciona apoyo emocional y un sentimiento de pertenencia.
  4. Priorizar el cuidado personal, como el ejercicio regular, la alimentación balanceada y la gestión del estrés, fortalecer nuestra resiliencia y bienestar emocional.
  5. Practicar la autocompasión y el perdón hacia uno mismo y hacia los demás nos permite liberarnos del pasado y vivir en el presente, aprovechando al máximo cada momento.

¿Cuál es el secreto para ser auténticamente feliz?

Una dama tiene un dedo sobre sus labios en señal de que algo es secreto.

Para ser feliz una sola cosa es necesaria: liberarse de esas ataduras mentales y soltar. Puedes desear, pero tienes que soltar y confiar.

Cuando hay confianza absoluta, no hay esfuerzo, todo fluye. Puedes desear cosas, pero no aferrarte a estas. Además, sabes que si son necesarias para ti, se te darán y simplemente las obtendrás.

Liberarse de las ataduras constituye una tarea absolutamente gratificante. Es un estado emocional basado en la confianza. Es una sensación de bienestar basada en la aceptación.

Se trata solo de la visión, de abrir los ojos y esperar la oportunidad en la que te puedes dejar llevar. Porque ten la seguridad que aquello que sueñas aparecerá. Obviamente, tú te vas a esforzar, pero vas a confiar en que se dará.

Cuando tus muchos esfuerzos por obtener algo han sido en vano, no renuncies.

Aprende a disminuir tus esfuerzos y a confiar más. Aprende a confiar en alguien más grande que tu propia individualidad.

Eso sí, recuerda que en todos estos casos, al pasar la responsabilidad a ese Ser Superior, ya no eres tú quien va a actuar.

En mi caso, creo fielmente que es Dios quien va a obrar de acuerdo a su voluntad, y lo hará en el momento perfecto.

Cierro con las palabras de Helen Keller: “No puedes lograr nada sin esperanza y confianza”.

Frase de Confucio que dice: